¡Buenas a todos!
Esta entrada llevaba en borradores desde hace más de 7 meses y ya no me acuerdo a santo de qué escribí este borrador, pero me puedo hacer una idea.
Seguramente fuera por el anuncio de un nuevo juego, Kickstarter, prototipo o algo de esto que volviera a usar ONE MORE TIME una temática sobada con los mismos estereotipos de siempre y, a mi parecer, los errores de siempre.
Así que voy a intentar plasmar mi visión de lo que viene siendo la temática y la inclusividad. Pero sin dar ningún ejemplo en concreto (porque tampoco tengo nada en contra de los juegos/editoriales/cosas que han propiciado este artículo), así que allá voy.
Es curioso, porque la gente parece no tener hartura con los juegos de Zombies, de Gladiadores, de fantasías inventadas, de granjas, de vikingos, de Cthulu, de la situación política actual… Y lo peor no es realmente el tema, es que andan todos cortados siempre por un mismo patrón.
Con este post no pretendo quejarme de ésto (porque para eso ya está Twitter) pero si intentar alentar a la gente que está diseñando y que nos lee (así que será más bien poca) a hacer otra cosa o a intentar dejar su huella.
¿Por qué no hacer algo diferente? Quizás porque son como temáticas estrella y a la hora de ventas puede ayudar mucho, vale, pero…¿Y si le das tu toque? No hagas el juego de huir de zombies nº36908 de la BGG en el cual «un grupo de personas se han quedado aisladas y tienen que sobrevivir/huir de los zombies». Yo que sé, que no sean zombies al uso, que sean ¡Ratones zombie! Y las personas no son personas! ¡Son quesos! Quizás no es el mejor ejemplo pero creo que sabéis por dónde voy.
No hagas un juego de fantasía medieval con sus dragones y sus estereotipos a tope donde un poderoso guerrero cruje a todo cristo y hay una pícara que, al ser una mujer, pues poca fuerza tiene y mejor que o que robe de los bolsillos o se dedique a curar a la gente. ¿Y si inviertes los papeles? Y es una mujerona que se los cruje a todos mientras un mindundi le cura las heridas?
Y aunque este me toque de cerca, y quiera que hagamos un juego de granjas algún día y tal, ¿Por qué no darle un giro? Que no vaya de plantar trigo aquí, que plantes en la Luna, por decir algo.
Vale, pues aquí muchos podríais decir: Hombre, curritos de LlamaDice, que el The Red Cathedral va de construir cosas medievales, GUIÑO-GUIÑO, COMO QUE NO ES MUY ORIGINAL ¿EH? Pues para eso está el no construir una catedral cualquiera. Para eso se ambienta en la construcción de la catedral de San Basilio, para intentar no ser un juego de construcción con recursos medievales del renacimiento. Igual que cuando en un inicio, trataba sobre las obras de Bernini y Borromini en vez de Miguel Ángel o Leonardo DaVinci.
Al igual que Aalsmeer, que en vez de ser el enésimo juego de la burbuja de los tulipanes, va del mercado de flores más importante del mundo (que vale, que tiene tulipanes mimimimi). O Pelea de Llamas que bien podría ser una pelea de magos o de gladiadores en una arena. Lo de Terraforming Dice Duel no cuenta que ya le estamos cambiando el tema y haciéndole cambios para aplicarnos el cuento 😀
Y por eso Mondrian va de un pintor neerlandés y no de Cthulu. Por eso Ray Master está ambientado en la película «Cariño, he encogido a los niños» y no en Sci-Fi de siempre. Por eso Aloha Pioha son piojos hawaiianos que están jugando con los pelos de una niña y no escoceses que tiran de una cuerda.
Intentad ser originales con el tema, y si es un tema manido, intentad darle un giro que sea reconocible. Intentad ser inclusivos si hay personajes, al menos en el proto, porque si al final se llega a editar no vais a poder tener el control de todo (Por eso en Ray Master es un profesor viejo y un ayudante y no una doctora con un Nobel y un becario). Pero tenéis que intentarlo, haced que el juego sea vuestro y no uno más. Haced lo que otros no hacen y, yo que sé, no pongáis a jamonas con un canalillo de aquí a Roma o personajes completamente secundarios. Sed raros.
Que si queréis hacer un juego de gladiadores, pues oye, pero… ¿por qué no de gladiadoras?
Has one comment to “Sed raros”
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Juan Carlos Romero - 25 enero, 2018 at 11:16
Me ha gustado mucho. Inteno seguir esa filosofía.
Ya sabéis, poetas del siglo de oro, periodo isabelino, mujeres escritoras…
Pero, ser raro dentro de los raros, no nos convirte en normales?